En la parte 1 de esta peculiar prueba estuvimos hablando de aspectos tan importantes del Abarth 500 como su atractiva estética o su impresionante aspecto interior, algo que no pasará desapercibido para nadie, sobre todo para ti si eres uno de los pocos afortunados en tener un Abarth 500 en tu garaje.
En esta segunda parte nos centraremos en otro tipo de aspectos tan importantes como son el rendimiento de tu motor o directamente el comportamiento de este pequeño urbano de 135 caballos que promete sensaciones con tan sólo introducir y girar la llave cuando el sonido del motor, con tan sólo arrancarlo, nos pondrá el bello de punta.
MECÁNICA Y COMPORTAMIENTO
Precisamente este es uno de los puntos fuertes del Abarth 500, no solo sus prestaciones, sino por un enamorador sonido ronco que que emanan sus escapes nada mas ponerlo en marcha. Esto, unido a una postura de conducción correcta, muy mejorable si el volante pudiera regularse en profundidad, tan sólo se puede hacer lo propio en altura, y a una corta palanca de cambios perfectamente situada.
Una vez puesto en marcha nos encontramos, con tan sólo andar unos metros, con una luz parpadeante que nos indica que subamos una marcha, algo muy común mientras conducimos este vehículo y a lo que deberemos familiarizarnos en lo sucesivo. Por ahora, ni rastro de esos prometedores 135 caballos que tanto nos gustaba oír cuando hablábamos de este Fiat 500 ??trucado?.
La verdad, en una primera toma de contacto el coche parece que funciona correctamente, sobre todo si nos atrevemos a apurar un poco más las marchas y ??pasamos? un poco del indicador que insistentemente nos indica que subamos de marcha, ahora si que estamos ante un coche algo más divertido pero sin esa sensación que esperábamos de un coche de estas características.
Hasta ahora, un coche muy correcto, divertido gracias a unas aceleraciones más o menos atrevidas, bien balanceado, gracias a una suspensión en ocasiones dura y sobre todo fácil de conducir para cualquiera que ose ponerse al volante de este modelo pero del que literalmente, sobre todo al meterte literalmente en los asientos Sabelt, ponerte el cinturón y escuchar el sonido de su motor uno espera más, mucho más.
En respuesta a esto pulsamos el botón ??Sport? situado en la consola central sin esperar mucho cambio, cual es nuestra sorpresa cuando nos damos cuenta de cómo la dirección se endurece muchísimo volviéndose mucho más directa y confiable y sobre todo el acelerador se vuelve mucho más sensible, concretamente el par máximo pasa de los 180 Nm hasta los 206 Nm, cifra simplemente increíble para un coche como el Abarth 500.
Sin lugar a dudas con esta opción el Abarth se vuelve un coche mucho más atractivo y pasional, precisamente lo que buscábamos desde que abrimos sus puertas por primera vez y decidimos sentarnos en sus asiento deportivo. En carretera abierta, la verdad me llamó mucho la atención no solo su aceleración desde parado o a poca velocidad cuando apuramos alguna que otra marcha, sino su recuperación de 80 a 110 km/h, recuperación que ocurre en tan sólo unos pocos segundos.
Llegados a este punto tenemos que hablar del TTC o Torque Transfer Control, un sistema activable a través de un botón situado en la consola central y que básicamente funciona a modo de diferencial trasero autoblocante repartiendo el par máximo y ayudando al control de tracción a control el pequeño Abarth 500 en situaciones ??arriesgadas?. Es más, en curvas cerradas o en rotondas rápidas cuando el ??pequeñín? pierde adherencia con el TTC funcionando las cosas cambian considerablemente siendo mucho más fácil controlar el Abarth 500.
Lamentablemente este coche no es el más indicado para realizar viajes en autovía, no porque no responda bien en este tipo de entornos, todo lo contrario, sino que los asientos deportivos y una suspensión demasiado dura unida a neumáticos de bajo perfil puede ocasionar que pasados unos cientos de kilómetros prefieras haber cogido un autobús más que ir con el pequeñín. Por otro lado tengo que detenerme y hablar de su reducida autonomía, 35 litros, algo que puede hacernos parar en mitad del viaje más de lo deseado.
Ahora bien, quizás lo que más me ha sorprendido son los consumos del ??pequeñín? ya partes de esta prueba, donde quizás se haya dado algo más de ??zapatilla? de lo normal el Abarth 500 ha mostrado un consumo medio de tan sólo 7.8 litros/100 km durante toda la prueba. Precisamente, si de lo que hablamos es de consumos, en conducción deportiva las cifras rondaron los 14.5 litros/100 km mientras que en ciudad se contuvieron en algo menos de los 10 litros/100 km. Por otro lado, en autovías a 110 km/h el consumo se quedó en unos increíbles 5.8 litros/100 km. Sin lugar a dudas toda una opción si quieres un coche pasional pero que no se descontrole cuando conducimos en un régimen alto de vueltas.
EQUIPAMIENTO
Si nos detenemos en el equipamiento de serie del más pequeño de los escorpiones no por ser un Fiat 500 significa que nos defraude ya que, entre otras cosas nos encontramos con ABS + EBD, ESP + EBS + TTC y siete airbags para garantizar una correcta seguridad al volante cuando conducimos nuestro pequeñín.
Por otro lado nos encontramos equipamiento como Hill Holder, indicador de cambio óptimo, aire acondicionado, faros antiniebla, llantas de 16 pulgadas, doble salida de escape, suspensión deportiva, pinzas de freno rojas, cierre centralizado con mando, elevalunas eléctricos, blue&me, volante multifunción, ordenador de a bordo, espejos eléctricos y térmicos?
Entre la opciones más interesante para instalar en tu nuevo Abarth 500 puede interesarte elementos como las llantas de aleación de 17 pulgadas, 200 euros, tapicería en piel Abarth, 950 euros, Blue&Me NAV, 510 euros, climatizador monozona, 310 euros, techo solar fijo, 410 euros, faros de xenón, 400 euros, sistema de sonido HI-Fi Interscope, 407 euros?
Por último, una de las opciones más interesantes si todavía buscas algo más en tu Abarth 500 es incluir el kit Essesse, kit en el que por tan sólo 2.500 euros sin contar la mano de obra para montarlo tu pequeño escorpión pasará de 135 a 160 caballos amén de adquirir nuevo equipamiento como sensor de presión de los neumáticos, frenos de mayor potencia, filtro de aire especial, suspensión rebajada y llantas de aleación de 17 pulgadas.
PRECIOS
En cuanto a precios poco o nada hay que decir ya que en anteriores apartados hemos ido relatando poco a poco el precio del equipamiento extra. Quizás sea más correcto decir que el Abarth 500, según el configurador de la página, parte de los 19.350 euros IVA, impuesto de matriculación y transporte incluidos.
En cuanto a la unidad probada, al precio anterior hay que sumar los elementos incluidos como la pintura Rojo Scudería, 360 euros, llantas de aleación den 17 pulgadas por 220 euros, climatizador automático por 310 euros, faros de xenón por 700 euros, retrovisor interior fotocromático, 110 euros, Blue&Me NAV, 510 euros o el kit adhesivo abarth ss blanco por 210 euros, lo que hace un total de 21.410 euros
CONCLUSIONES
Sin lugar a dudas el Abarth 500 no es un coche que se compre con la razón, sino con el corazón. Un coche que cuenta, entre otras cosas, con un chasis impecable, un motor realmente sorprendente y una terminación aceptable sin embargo sorprenden que elementos como el climatizador queden fuera el equipamiento básico de un modelo cuyo precio sobrepasa de serie los 18.000 euros
Al menos, eso si, por algo más de 20.000 euros, incluyendo elementos como las llantas en 17, navegador, kit de personalización? recibiremos un auténtico deportivo en frasco pequeño con el que pasar muy buenos ratos. A mi forma de verlo, si me cuadran los números, no dudes que yo apostaría por tener una unidad en mi garaje privado.