Según la marca alemana, Mercedes, todas las versiones del próximo Clase C incorporarán tecnología híbrida para lograr una reducción del consumo y las emisiones de gases contaminantes.
La nueva generación llegará a finales de 2013 y su desarrollo se está llevando a cabo para cumplir con los niveles de CO2. El modelo diésel más básico que están probando en estos momentos emite unos 100 g/Km de CO2, y su homólogo en gasolina se coloca entre los 110 y los 120 g/Km.
Además de la disminución de la cilindrada (downsizing) y del uso de motores eléctricos auxiliares en los nuevos sistemas híbridos, la nueva Clase C se favorecerá también de una rebaja significativa en las pérdidas de energía por fricción en el motor y la caja de cambios, así como de una importante reducción de pesos, que se cifra en un 10% aproximadamente, aunque se desconoce la razón.
Vía: autocar