Desde Spa-Francorchamps, Mercedes-Benz ha querido que hoy más que nunca, conozcamos mucho más de cerca la esencia y la historia de su última creación, el SLS AMG GT3.
A fin de cuentas, estamos ante mucho más que una simple variante de competición del SLS AMG Gullwing. Y es que comparándolo con el original 300 SEL 6.3, está claro que las reseñas y las similitudes, van mucho más allá de la pura casualidad.
Mercedes-Benz ha querido que seamos nosotros, los que tengamos ambos modelos a mano, y podamos comparar ambos. Muchas décadas separan uno del otro, pero ambos se unen con un mismo fin, un mismo carácter, y una misma esencia.
Mientras que el 300 SEL 6.3 cuenta con un propulsor original de unos bestiales 6.8 litros y una potencia final de 428 caballos, queda claro que su sustituto en el día de hoy, no se ha quedado atrás, en absoluto. Si bien es cierto que comparándolo con el V8 de 6.3 litros que porta el Gullwing parece incluso quedarse grande, las diferencias no son tantas como parecen… ¿con cuál te quedas?
Vía: Autoblog