Las marcas logran cada vez más avances en el campo de los diésel, lanzando propulsores más potentes, prestacionales, complejos y también eficientes. Y es que no es para menos si tenemos en cuenta que en Europa la mitad de los vehículos que se venden son diésel.
Audi nos presenta hoy su último lanzamiento, el V6 3.0 TDI biturbo de 313 CV y 650 Nm de par. Como observarás, su cilindrada no es especialmente alta, gracias al empleo de un doble turbocompresor, y también a otras tecnologías como inyección common rail que funciona hasta 2.000 bares de presión.
Los modelos que lo tendrán disponible serán los Audi A6, Audi A6 Avant y Audi A7 Sportback, en todos ellos se caracterizará por un denominador comín: la tracción Quattro y la caja de cambios Tiptronic de 8 velocidades serán inseparables. El consumo en los tres modelos es idéntico -y bastante ajustado, dicho sea de paso-: 6,4 litros cada 100 kilómetros. Cabe destacar además que para mejorar el sonido del mismo (el sonido de un diésel no es su fuerte), lleva un altavoz instalado para variarlo un poco y dotarle de un sonido más similar al de un propulsor gasolina. Sí, es lo mismo que ha hecho BMW con la nueva generación del M5.
De los dos turbos (refrigerados por agua), uno es el encargado de proporcionar la potencia y par a bajas vueltas, trabajando entre las 1.450 rpm hasta las 2.800 rpm, si bien a partir de las 2.400 vueltas entra en funcionamiento el segundo turbo de forma independiente entre las 3.500 y 4.000 rpm. Ambos van conectados por una válvula específica que es la encargada de determinar el soplado de los turbos en cada momento.
A nivel prestacional, todos están limitados a 250 Km/h, y en el caso del A6 realiza el 0-100 Km/h en 5,1 segundos, mientras que en los A6 Avant y A7 Sportback necesitan 5,3 segundos para alcanzar los 100 km/h desde parado.
Finalmente, en lo referente a precios, los encontraremos por 59.990 euros para el A6 Berlina y de 62.550 euros en Avant. Por su parte, el A7 Sportback 3.0 tendrá un precio de 69.150 euros