En el pasado, General Motors contaba con una parte del accionariado de Isuzu, sin embargo, en la mala racha que atravesó recientemente el grupo automovilístico estadounidense, se vio obligado a vender su participación allá por el año 2006 como fruto de su reestructuración a fin de poder obtener liquidez de forma fácil y rápida.
Sin embargo, General Motors ahora tiene planeada la adquisición de un 10% de Isuzu a fin de poder comercializar vehículos industriales y camionetas en mercados como Asia y Sudáfrica. Esta adquisición podría también obligar a la nipona Toyota a desprenderse del 5,9% que cuenta actualmente para no entrar en un conflicto de intereses entre ambos grupos.
Así mismo, también podría tener repercursión en las conversaciones que Isuzu mantiene en la actualidad con el grupo Volkswagen para formar una alianza y crear una camioneta para comercializar en el mercado asiático. Por lo que, como puedes ver, la vuelta de General Motors al accionariado podría suponer bastantes cambios dentro de la compañía, especialmente a lo que se refiere a sus futuros proyectos.