Sólo podemos resumirlo con una palabra… impresionante. El Gran Premio de España ha dado un giro radical y ha dicho adiós a aquellos trenecitos de coches y las carreras sin adelantamientos y emoción. Hoy ha habido de todo, y lo mejor de todo es que los protagonistas no han sido los habituales.
Con Lewis Hamilton penalizado y mandado desde la primera hasta la última posición por quedarse sin gasolina al final de la clasificación, los dos primeros, Pastor Maldonado y Fernando Alonso, han sido los únicos que se han disputado la carrera. Llena de emoción, adelantamientos, y también llena de sorpresas.
Con Fernando Alonso quedándose en la segunda posición por muy poco, los que también han dado un golpe sobre la mesa muy fuerte han sido tanto Lotus Renault como Kimi Räikkönen. El piloto finlandés se ha quedado a una vuelta de adelantar al piloto español, recortándole más de dos segundos por vuelta en el tramo final de la carrera. Una demostración de que algo está cambiando en la Fórmula 1, algo que por lo que parece, es muy, muy bueno.
Como apunte interesante, Lewis Hamilton ha quedado en la octava posición aún saliendo desde la última, consagrando una tremenda remontada y habiendo hecho una de las mejores carreras de hoy.