Debido a la importancia que ha ido adquiriendo durante los últimos años la seguridad en caso de impacto en los coches (un argumento que a muchas marcas le ha servido para vender más), cada vez más marcas se esfuerzan en conseguir a toda costa las ansiadas cinco estrellas. Y debido a ello, una gran cantidad de modelos salían con dicha puntuación, así que para poner un poco más difíciles las cosas a los fabricantes, el Euro NCAP ha ido reformando paulatinamente sus exigencias.
Una de las próximas reformas vendrá en forma de que los sistemas de sistemas de asistencia autónoma a la frenada de emergencia también contabilizarán en la puntuación final obtenida por los modelos que someten a las pruebas de choque. El funcionamiento de estos sistemas es mediante un radar que va ubicado en la parte frontal del vehículo y ya dependiendo del funcionamiento del sistema puede o bien actuar directamente sobre los frenos del vehículo o bien alertar al conductor de una colisión inminente.
De acuerdo a las informaciones ofrecidas por el organismo, en la actualidad, el 79% de los modelos de coches que se comercializan en Europa no lo pueden ni montar en opción, y en el 66% de los últimos lanzamientos de los fabricantes tampoco está disponible. Según estimaciones, este sistema puede reducir el número de accidentes en un 27%.
Como decíamos, con la creciente preocupación de los consumidores por la seguridad de los coches, es de esperar que cuando esto entre en vigor en 2014, este sistema se popularice en la mayoría de modelos.