Muchos ya esperaban con impaciencia las primeras imágenes oficiales (aunque filtradas en este caso), de la nueva generación del Volkswagen Golf, la VII, que tradicionalmente y en todas sus generaciones ha sido siempre un referente a seguir en el segmento, por ser en términos generales de los modelos más equilibrados en todos los aspectos.
Igual que las anteriores generaciones, los diseñadores e ingenieros de VW han seguido apostando por una serie de factores que hasta la fecha le han funcionado muy bien en lo que a ventas se refiere. Sí, el Golf VII sigue siendo un modelo sobrio y continuista, que no arriesga mucho en diseño a diferencia de otros modelos de la competencia.
El frontal se distancia un poco del VI para alejarse más a la estética del Polo, con un toque más de agresividad (que suponemos que se acentuará en las versiones deportivas GTI y R). En la zaga, se optan por unos pilotos muy similares a los empleados y ligeros cambios como en la caída del techo o incluso la tapa del depósito de combustible, que adopta una forma un tanto peculiar.
A nivel de ingeniería, la nueva generación del Golf implementará mecánicas con desconexión de cilindros para reducir consumos (algo que ya está disponible en el A3), además de otros avances técnicos como la reducción de 100 kg respecto a la anterior generación gracias al uso de una nueva plataforma.
En su habitáculo, encontramos un salpicadero cuya consola central está ligeramente enfocada al conductor. Hay que tener en cuenta que se trata de un acabado alto, con la máxima dotación posible, y lo cierto es que resulta bastante vistoso, junto con detalles como cuero camel y acabados en plástico brillante (esperemos que no se arañen fácilmente), pero habrá que esperar a ver fotos de versiones más espartanas para sacar conclusiones.
Volkswagen Golf VII
