Fue allá por 1963 cuando Ford Motor Company casi se convierte en propietaria de Ferrari en una adquisición en la que Ford debía invertir una buena cantidad de millones. Lamentablemente Enzo Ferrari negó la venta de la compañía tras enterarse de que Ford tenía pensamientos de crear un vehículo para competir en la Indy 500
Como es lógico, cuando ya estaba la compra prácticamente acordada a falta de unas firmas, que Enzo Ferrari finalmente no quisiera vender la compañía no le sentó nada bien a Henry Ford II quien directamente, con ese dinero, creó una división de carreras para desarrollar un vehículo destinado a carreras de resistencia capaz de vencer a cualquier Ferrari en cualquier circuito a nivel mundial.
El resultado de este cabreo fue nada menos que el Ford GT40 que ganó Le Mans en 1966, 1967, 1968 y 1969. El coche se hizo tan famoso que durante décadas se han creado numerosas réplicas del modelo, incluso Ford creó una versión moderna (Ford GT) en 2004. Como es lógico, tener un Ford GT40 en posesión es algo de alabanza, de ahí que sea la joya de la corona en todas las grandes colecciones
Después de una breve historia sobre el modelo hay que hablar de cierto Ford GT de 1965 que será subastado por RM Auctions en un evento celebrado en Arizona, evento en el que se espera que este mítico superdeportivo consiga un precio de venta muy cercano a los 3 millones de dólares.
El modelo en concreto es una unidad pintada en color verde pino equipado con elementos como parabrisas térmico, espejos laterales montados sobre las aletas, un tanque doble de combustible, silenciadores para uso en carrera? No se sabe muy bien si el modelo es uno de los siete ejemplares MKIII que se fabricaron aunque, por los faros bien podría tratarse de un MKI modificado para su uso en carretera
Vía: motorauthority