La nueva temporada de Fórmula 1 está hoy más que nunca, a la vuelta de la esquina. En tan sólo dos días comenzará el gran circo mundial con su aparición estelar en Albert Park, Melbourne. El Gran Premio de Australia se celebra este fin de semana, y como tal, todos estamos muy expectantes de cómo afronta este inicio de temporada cada equipo… y cada piloto.
Sabiendo de antemano que nos espera algo similar al «más de lo mismo» del pasado año 2012, esto es con diferencia una buena noticia. La igualidad de las escuderías y de los pilotos sobre la pista es máxima si comparamos con años atrás, viendo cómo los podios muestran carrera tras carrera, pilotos y colores diferentes. Repetir no es tan fácil como años atrás… y esto, es sinónimo de espectáculo y diversión.
Como tal, avanzar con tal igualdad es verdaderamente complicado. En el caso de McLaren, la escudería británica ha decidido tomar más riesgos de los habituales y encarar esta Temporada 2013 con algo más de riesgo que el resto de escuderías punteras. Martin Whitmarsh, el director de la escudería británica, ha confirmado que a diferencia del pasado año 2012 y del resto de equipos para esta temporada, han arriesgado bastante más en el desarrollo del coche. Una buena explicación que nos hace comprender los tests tan complicados que la firma británica ha tenido durante toda esta pre-temporada. Pero… ¿y si les sale bien?
Arriesgar de esta manera puede suponer dar un importante paso adelante, si no es hacia atrás. El objetivo continúa siendo Red Bull Racing y cómo no, Sebastian Vettel. Jenson Button y Sergio Pérez, pilotos de McLaren, serán dos de sus numerosos rivales esta temporada.
Vía: GP Update