El BMW i3 de producción a estas alturas, no esconde demasiados secretos para nosotros. El pequeño compacto eléctrico se esconde en las calles con un tremendo camuflaje, el cual cubre absolutamente todo su aspecto y su aerodinámica. No olvidemos que no hace mucho, lo descubrimos sin camuflaje... en su versión de producción.
Hablando del BMW i3, en MotorAdictos siempre hemos recalcado el tremendo interés que creará en todo el sector de los compactos premium y pequeños MPV. ¿Por qué? Estamos hablando de un coche eléctrico de rango extendido, más que de un híbrido. Una de las apuestas más fuertes de BMW para la submarca «i» y con la que tratarán, obviamente, ser pionero en un sector premium donde por ahora, no hay vida más allá de coches híbridos.
Sus prestaciones y mecánica son muy interesantes: un conjunto de propulsión eléctrica (incluyendo un paquete de baterías de litio-ión) otorgan una potencia final de 167 caballos y una autonomía superior a los 130 kilómetros. Y para no quedarse «cortos», el motor de combustión interna hace que la autonomía del coche eléctrico aumente hasta los 300 kilómetros. No está mal, ¿no crees?
En estas fotos espía podemos ver sus proporciones reales, compararlo con otros coches aparcados… a pesar del tremendo camuflaje con el que cuenta. No olvidemos que debutará este año, y será el paso previo al gran BMW i8.
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