El mundo de los compactos deportivos acaba de recibir un nuevo referente con la llegada del ABT RS3-R, una versión extrema del ya de por sí potente Audi RS3. Este modelo exclusivo, estará limitado a tan solo 125 unidades entre las versiones Sedán y Sportback.
La firma alemana ABT Sportsline ha aplicado su experiencia en preparaciones para transformar el RS3 en una auténtica máquina.
El corazón de esta bestia es el conocido motor de cinco cilindros turboalimentado de 2.5 litros, pero llevado a un nuevo nivel. Gracias al paquete de mejoras ABT Power R y un intercooler de alta eficiencia, el RS3-R desarrolla nada menos que 510 CV (375 kW) y 600 Nm de par motor. Estas cifras suponen un incremento de 109 CV y 100 Nm respecto al modelo de serie.
El resultado es una aceleración de 0 a 100 km/h en apenas 3,3 segundos, medio segundo menos que el RS3 estándar, que necesita 3,8 segundos para completar el mismo ejercicio. La velocidad máxima se mantiene en 290 km/h, una cifra que difícilmente se podrá explotar en condiciones normales.
Otro aspecto destacable es la posibilidad de personalizar la experiencia de conducción mediante la aplicación myABT, que permite acceder a datos de rendimiento en tiempo real y seleccionar diferentes modos de conducción adaptados a cada estilo.
El aspecto exterior del ABT RS3-R refleja perfectamente sus capacidades dinámicas. La carrocería incorpora numerosos elementos aerodinámicos fabricados en fibra de carbono con acabado brillante que no solo mejoran su apariencia, sino que optimizan su comportamiento a alta velocidad.
El frontal recibe un nuevo labio inferior y unos llamativos canards o flics que redirigen el flujo de aire, mientras que los laterales cuentan con faldones más agresivos. En la parte trasera destaca un difusor de mayor tamaño, complementado en la versión Sportback con un alerón adicional sobre el portón.
Las imponentes llantas forjadas ABT HIGH PERFORMANCE HR20 de 20 pulgadas calzadas con neumáticos 245/30 R20 completan la transformación visual y contribuyen a mejorar el comportamiento dinámico gracias a su reducido peso, que disminuye la masa no suspendida.
Para gestionar adecuadamente el incremento de potencia, ABT ha modificado la suspensión con muelles específicos y estabilizadores deportivos que garantizan un agarre superior y una estabilidad precisa en curvas. El resultado es un coche que transforma cada giro en puro placer de conducción gracias a su batalla corta y su optimizado comportamiento en carretera.
En el interior, los cambios son más sutiles. Los asientos deportivos reciben el logotipo ABT y la firma RS3-R, los umbrales de las puertas muestran la inscripción «1 de 125», y se añaden detalles como un botón de arranque personalizado, iluminación específica en las puertas y alfombrillas con el logotipo ABT.
