Para remontarnos a la última ocasión en la que Opel estuvo cerca de ser vendida, no hace falta que retrocedamos muchos años: 2008-2009. En plena vorágine por el rescate de General Motors, ésta, se estuvo planteando seriamente en el proceso de reestructuración la venta de Opel, y mantuvo durante meses conversaciones con el fabricante de componentes canadiense Magna así como su socio ruso Sberbank. Finalmente, GM se echó atrás por sorpresa y ahí se quedó todo: en agua de borrajas.
Pero… nuevamente las nubes de la venta se ciernen sobre Opel, y en este caso, por un grupo bien conocido por todos. PSA, la propietaria de Peugeot y Citroën ha anunciado públicamente que se encuentra en negociaciones con General Motors, y entre dichas negociaciones, estaría la adquisición de Opel/Vauxhall. De materializarse, PSA pasaría a superar a Renault y únicamente se vería superada por Volkswagen dentro del viejo continente, ya que Opel/PSA lograría una cuota de mercado del 16,3%, que aún quedaría lejos de la supremacía del 24,1% por parte de Volkswagen. De esta forma, se compensaría también la pérdida de cuota de mercado en Europa por parte de PSA frente a Renault.
La cooperación conjunta entre General Motors y Opel no es nueva, ya que mantienen una alianza desde el año 2012 con tres proyectos para Europa y una búsqueda constante de iniciativas de cara a mejorar su rentabilidad y eficiencia. Algunos analistas estiman ya el coste de la operación entre 2.600-3.300 millones de euros de llevarse finalmente a cabo, aunque esta cifra no es del todo correcta puesto que para elaborarla no se han tenido en cuenta algunos datos fiscales derivados de la operación, como la deuda de General Motors en Europa.
Por el momento los mercados han respondido de manera muy positiva a la noticia, con importantes subidas en bolsa para el grupo PSA. ¿Veremos finalmente esta compra materializada?