El Alfa Romeo Giulia Quadrifoglio está posicionado como uno de los debuts más importantes y llamativos de todo el Salón del Automóvil de Fráncfort. No es el modelo más caro ni tampoco el más lujoso, pero sí uno de los más atractivos y excitantes por todo lo que supone, y obviamente también por lo mucho que tiene que ofrecer. Y es que hacía muchos años, más bien décadas, que Alfa Romeo no competía frente a frente con iconos alemanes como el BMW M3, pero ahora sí, lo han hecho y con mayúsculas. Porque el Giulia Quadrifoglio es pura excitación, y en Fráncfort no ha hecho más que resaltar como esperábamos.
La marca italiana no ha presentado el resto de versiones, como en un principio se esperaba, pero sí ha llevado al salón alemán varias unidades del Giulia Quadrifoglio en varios colores y con diferentes opciones de personalización. Un deleite visual que a su vez confirma el interés de la marca italiana en posicionar el Giulia estándar en un salón más apropiado… ¿quizás Detroit? Pero centrándonos, Sergio Marchionne y sus chicos han querido que el Giulia tope de gama tenga máximo protagonismo en Alemania, y lo han conseguido. Porque es toda una llamada de atención.
Cifras que no dejan de sorprender
Es interesante resaltar que hace sólo unos días hemos conocido el tiempo que registra la berlina italiana en el viejo Nürbürgring, de sólo 7 minutos y 39 segundos. Es una cifra apabullante y muy por delante de lo marcado por el actual BMW M3 (en más de diez segundos), rival directo de cara a las ventas en Norteamérica y Europa. Esta cifra no debería sorprendernos del todo, ya que en cuanto a mecánica y capacidades prestacionales el italiano es sorprendente: motor Ferrari V6 de 2.9 litros, 510 caballos de potencia y 600 nm de par… todo esto, acoplado en el chasis Giorgio natural propulsión y desarrollado por la marca italiana en exclusiva para modelos de alto rango como el propio Giulia, y próximamente, el SUV de la marca. El peso neto se enclava en 1.524 kilos.
Como hemos dicho anteriormente, Alfa Romeo no ha confirmado cuando presentarán el Giulia en su totalidad, las versiones de acceso tanto gasolina como turbodiésel continúan siendo un misterio. Será quizás en Detroit, o más adelante en el Salón de Ginebra, cuando los italianos tiren de la manta.