Alpine ha desvelado hoy el prototipo Alpine A290_β. Se trata de la antesala de lo que será el Renault 5 más picante que veremos en su guisa de producción para el año 2024 y que a su vez asentará los pilares de electrificación de la marca.
Mide 4,05 metros de longitud, 1,85 de ancho y 1,48 de alto. Muestra una pintura exterior de color blanco con numerosos detalles en color negro como en el techo y algunas zonas del capó, así como carbono. Las llantas son en 20 pulgadas (que combinan los colores de la bandera francesa) y como se puede apreciar también, los neumáticos están fabricados por Michelin. A priori y según comentó recientemente el jefe de diseño Raphael Linari a Top Gear, el 85% de su aspecto exterior se mantendrá en la variante de producción.
No sucederá lo mismo sin embargo con su interior, donde encontramos una configuración de tres asientos donde el conductor va en posición central y el salpicadero tiene forma de flecha, inspirándose en los monoplazas de Fórmula 1. Además, su volante también está inspirado en los Alpine A470 de LMP2 y del A523 de Fórmula 1, de forma que en este caso es donde veremos los cambios más notables.
La versión de producción del A290 hará uso de la plataforma CMF-B EV del Renault 5, sin embargo, todavía no sabemos qué motorización empleará. Es de esperar, en cualquier caso, que sea más potente que las motorizaciones anunciadas para el Renault 5 de 107 y 130 CV, situándose previsiblemente en torno a los 200/215 CV para su iteración inicial, tal y como anticipó el ingeniero jefe de la marca en unas declaraciones a Autocar.
También sabemos de manera oficial por parte de Alpine que contará con un sistema de vectorización de par, frenos Brembo de cuatro pistones como los empleados en el A110, así como una suspensión trasera multibrazo