Durante este puente festivo hemos podido comprobar en vídeo lo divertido de llevar que es el Alpine A110. Y es que de una manera u otra, la marca francesa ha sabido sacar mucho jugo a un proyecto que hasta hace solo unos años se antojaba demasiado ambicioso, pero que con el paso del tiempo terminó convirtiéndose en pura realidad. El Alpine A110 es todo un caballo ganador tanto para Alpine como para Renault, y cuidado, porque aún tiene mucho que ofrecer…
…ya que aunque la vida útil del deportivo de motor central-trasero no ha hecho más que comenzar, Alpine ya prepara una versión más radical y cercana a circuito que hará una primera aparición el próximo año. Alpine buscará que el A110 llegue a ser una verdadera pesadilla para el Porsche 718 Cayman, y aunque es cierto que por mucha potencia que obtenga, se alejará de los 385 caballos marcados por el anterior Porsche Cayman GT4 Clubsport, la baza del irrisorio peso neto y un ajuste de chasis digno de un turismo de competición, puede que al final el coupé francés acabe peleando por el liderazgo absoluto.
Para conseguir tal hito, Alpine reducirá el peso neto en 50 kilos. El actual A110 pesa 1.080 kilos -frente a los 1.385 kg del 718 Cayman-, con esta reducción de peso aportando para ello materiales ultraligeros, como aluminio reforzado, CFRP y fibra de carbono, el peso neto se acercaría a la tonelada exacta y en combinación con un motor potenciado hasta 300 caballos -recordemos, el motor es solo un 1.8 litros de 4 cilindros-, las cifras serán de auténtico vértigo. Yendo más allá, veremos mejoras en la suspensión, rebajada y endurecida, y también un sistema de frenado más radical y con discos de mayor diámetro.