Aunque habíamos visto hasta la fecha varias imágenes del nuevo crossover compacto de la firma japonesa tras su presentación en el pasado Salón de Ginebra, el Toyota C-HR, aún nos faltaba por ver las imágenes del interior. Y algo nos decía que en vista de la apuesta en su exterior hacia unas líneas mucho más dinámicas -aún a costa de sacrificar su practicidad-, su interior también bebería directamente de esta apuesta más arriesgada y tal y como podemos apreciar… así ha sido.
Lo cierto es que salvo el GT86, el C-HR rompe continuidad con las líneas empleadas hasta la fecha por parte de Toyota, que aún sin ser un modelo deportivo, sí que apuesta hacia una estética mucho más atrevida y arriesgada, posicionándolo a caballo entre el Auris y el RAV4. Su longitud es de 4,36 metros mientras que su altura en la versión híbrida alcanza los 1,55 metros.
Pero vayamos a entrar a valorar su habitáculo. Lo primero que nos encontramos es la pantalla táctil de 8 pulgadas en una posición elevada, encima de las salidas de aire centrales y controles del sistema de climatización con una orientación claramente enfocada al conductor. Y aunque esté integrada en el propio salpicadero, lo cierto es que se ha priorizado más su altura por encima de la estética y de aunar una mejor integración dentro de la consola.
Existe una línea azul que recorre el salpicadero de manera horizontal, llegando también a los paneles de puerta con el objetivo de dar una mayor sensación de amplitud a los ocupantes, debajo de la cual se sitúa otra moldura de color negro piano que en las imágenes combina con la tapicería en cuero empleada del mismo color. Podemos apreciar también una mejora en la calidad de los materiales empleados.
Todos los C-HR integrarán de serie el Toyota Safety Sense que integra el asistente de cambio involuntario de carril, reconocimiento de señales de tráfico, luces automáticas de carreteras o un sistema de frenada automática de emergencia, aunque en acabados más altos de gama podremos optar a las llantas de aleación de 18 pulgadas, pintura metalizada bitono, equipo de sonido JBL con 576 vatios, cristales oscurecidos, sistema de entrada inteligente, entre otros.
La oferta mecánica en Europa (variable en función de mercados) estará formada por un 1.2 tricilíndrico gasolina de 116 CV y la misma motorización híbrida empleada en el Prius, con el que debería obtener unos registros en materia de consumos muy interesantes.
Toyota C-HR: imágenes del interior
