La nueva generación del Corvette está muy cerca y está claro que hemos entrado en el año decisivo. El año en el cual veremos un Corvette que marcará un antes y un después en la historia del coupé americano por excelencia y con el que la marca estadounidense tratará de adaptarlo a un mercado cambiante y que muy poco tiene que ver con los de estas décadas atrás.
Con esta ilustración, podemos ver con rotundidad qué nos depara el futuro inmediato respecto al Corvette C8. El sustituto del C7 Stingray cambiará radicalmente el diseño por una configuración de motor central-trasero que se traducirá en una línea trasera mucho más larga y un frontal y capó mucho más corto. Esta ilustración, que nos muestra cómo será la variante descapotable, muestra este nuevo diseño de manera perfecta y fiel a los prototipos de prueba.
Yendo más allá, el nuevo Corvette C8 incluirá cambios importantes tales como nuevos motores mucho más evolucionados y potentes que los del actual C7. En MotorAdictos hemos hablado largo y tendido acerca de lo que está por venir en el vano motor: una gama que irá desde alrededor de 500 caballos, hasta un tope de 850 cv en la guisa más potente y radical. Esta última opción, estará al nivel de superdeportivos europeos de primera categoría, objetivo primordial de General Motors.
Mirando hacia adelante, está previsto que General Motors presente el Corvette C8 en algún punto de este año. Es interesante recalcar que estamos a dos meses del Salón del Automóvil de Nueva York, pero las informaciones hablan claro: es más posible que lo veamos en el Salón de Los Ángeles de noviembre.
