Las ventas vehículos eléctricos en Europa no está avanzando al ritmo que se preveía años atrás, algo que no ocurre en países como China donde las ventas de vehículos electrificados suponen ya más del 50% de vehículos nuevos.
Esto está empujando a que las marcas estén haciendo cambios en sus hojas de ruta para adaptarla a estos cambios en la demanda. La última en llevar a cabo esos cambios ha sido Aston Martin, que a través del presidente ejecutivo de la compañía (Lawrence Stoll) ha comunicado varios cambios que afectan a su hoja de ruta respecto a la electrificación.
Allá por Abril de 2022, se pusieron como objetivo dejar de lanzar nuevos modelos de combustión interna a partir del año 2030, además de lanzar su primer eléctrico en 2025, mientras que su primer híbrido enchufable llegaría este mismo año 2024.
Ahora, la compañía ha reculado y ha anunciado que su primer eléctrico llegará en el año 2027 como pronto, ya que consideran que hay más hype de EV que demanda real.
En su lugar, la compañía se centrará en la tecnología híbrida enchufable, siendo el primer modelo el Valhalla, que recordemos, cuenta con un motor de combustión interna V8 de 4.0 litros combinado con dos motores eléctricos y la estrategia de modelos PHEV de ellos pasarían por centrarse en torno a los motores V8 de Mercedes-AMG así como los V12, ya que consideran que en ese rango de precios no hay tantos clientes interesados en motores V6.
Stoll considera que seguirán produciendo modelos con motores de combustión hasta que la legislación se lo permita, ya que asegura que sus clientes quieren «sonidos y olores», por lo que asegura que seguirá habiendo siempre demanda, aunque sea pequeña.