Lo escuchamos y también lo vimos por primera vez, y después de todos estos anticipos ya era hora de que por fin lo descubriésemos en todo su esplendor. Llega el Aston Martin Vulcan y lo hace como el Aston Martin de competición más radical, exclusivo y contundente que jamás ha construido la marca británica. Un ejercicio de ingeniería pura y dura que pone sobre la mesa un coche de competición con una construcción a mano y de producción muy, muy limitada. Tan sólo 24 unidades se construirán de este rival natural de, entre otros, el Ferrari FXX K o el McLaren P1 GTR. La diferencia entre éste y el resto es radical: nada de sistemas híbridos, nada de motores más allá del portentoso doce cilindros. Ensamblado para la ocasión, por supuesto.
Del Aston Martin Vulcan no se han publicado detalles en profundidad más allá de lo estrictamente necesario para que nos puedan las ganas hasta que lo veamos debutar en el ya inminente Salón del Automóvil de Ginebra. Cuenta con un bloque motor V12 atmosférico de 7.0 litros y una potencia que supera los 800 caballos, y con creces. Construido desde cero, el chasis del británico es monocasco desarrollado en fibra de carbono y cuenta con buena parte de elementos del chasis y la mecánica desarrollado en materiales ligeros, como aluminio forjado o magnesio. No podemos negar que a primera vista lo que más atención capta no es toda la sartén de sutilezas mecánicas, sino el diseño, la aerodinámica y sobre todo el interior del Aston Martin Vulcan. Radical se mire por donde se mire, y creado así a conciencia.
Un diseño puro de Aston Martin
Aston Martin aprovecha la construcción desde cero para haber concedido barra libre a los diseñadores en búsqueda de una aerodinámica casi perfecta. Ejemplo de ello es la localización de los faros delanteros, en el mismo paragolpes y dejando liso por completo el capó a excepción de una portentosa toma de aire frontal. Tanto el frontal como la línea trasera es rotundamente radical, en ambos casos se recuerda la línea de diseño más moderna y puntera de Aston Martin, recordando incluso el diseño del One-77, al menos de las ópticas. En la parte trasera hay muy poco sitio; y es que todo lo ocupa el portentoso alerón trasero y un difusor que casi no cabe en el chasis del británico. Podríamos estar horas y horas hablando del diseño, porque Aston Martin ha conseguido que se nos ponga el vello de punta con este coche. Y sólo estamos ante las primeras fotografías oficiales de estudio.
Mucho más que un coche
Aston Martin ha confirmado que del Vulcan se construirán 24 unidades, y por el momento sabemos que la compra del coche abrirá las puertas a un programa de pilotos que la marca británica pondrá a disposición de los clientes del Vulcan y que incluirá, además de consejos, pruebas privadas y diversos eventos de alta categoría, el uso y conducción de otros modelos de competición de Aston Martin. Pero tendremos que esperar hasta el debut físico en el Salón de Ginebra para que conozcamos todos los detalles del Vulcan. De momento, es importante recalcar que es atmosférico y el V12 es el único medio de propulsión, unido a una caja de cambios secuencial de 6 velocidades. ¿Se puede ser más purista?