Ya es oficial, Audi presenta el nuevo RS5 Coupé de segunda generación y más allá de una estética muy atractiva y un diseño que de una manera u otra, ya lo esperábamos, lo que realmente sorprende es el propulsor que la marca de los cuatro aros instala en el vano motor. Se trata del mismo V6 turbo de 2.9 litros que debutó en el Porsche Panamera 4S, pero con una potencia aumentada hasta los 450 caballos.
El Salón de Ginebra abre sus puertas y tal y como esperábamos, Audi no defrauda y presenta con total rotundidad el RS5 Coupé en su segunda generación y marcando las pautas necesarias para consolidarse como un tremendo salto hacia adelante, que a priori no parece muy característico pero que de una manera u otra, está destinado a marcar una gran diferencia con el RS5 original. Con el seis cilindros de doble turbocompresor, Audi reduce el peso neto del bloque y yendo más allá, mejora notablemente las prestaciones además de reducir el peso neto y las capacidades dinámicas del alemán.
Audi confirma un 0 a 100 kilómetros por hora en 3.9 segundos y una velocidad punta de 280 km/h, gracias en buena parte a la reducción de peso superior en 60 kilos respecto al RS5 que sustituye. Acompaña al motor una transmisión automática de 8 velocidades, tracción total quattro con reparto de potencia 40:60 (eje delantero y trasero, respectivamente) y diferencial autoblocante deportivo en el eje trasero como opción. En lo que respecta a la estética y la imagen, llama la atención las llantas exclusivas que Audi instala en el coupé, junto con un paquete aerodinámico que marca y mucho las distancias respecto al S5.
Las ventas en Europa y España arrancarán este verano con una apertura de reservas previstas para mayo.
Audi RS5 2017
