En pleno apogeo de los automóviles con energías alternativas, no paran de desarrollarse nuevos proyectos y poner en marcha más alternativas energéticas en el campo del automóvil. Cualquier innovación nunca es suficiente y los ingenieros de la compañía británica GENeco nos lo demuestran.
Y es que han desarrollado un Volkswagen Beetle que se impulsa con gas metano, que se ha obtenido de diversos desechos orgánicos, como excrementos humanos. Curioso cuanto menos, ¿eh? Aún más curioso es que pese a lo que pueda parecer, no desprende ningún tipo de mal olor mientras se encuentra en funcionamiento. Para arrancar, necesita de gasolina sin plomo, pero una vez arrancado ya funciona con metano.
Por el momento es sólo un prototipo, aunque sus datos técnicos son interesantes: Para recorrer 16.000 km, basta con emplear los excrementos que generan una media de 70 familias anualmente. Tiene una autonomía de 400 km y alcanza una velocidad máxima de 183 km/h. Por lo demás, su conducción y manejo es como la de otro coche cualquiera.
La cuestión es, ¿llegará a tener éxito algo así en caso de su comercialización en el mercado? Todo será cuestión de esperar a ver si finalmente se materializa esta tecnología a un precio que no sea realmente prohibitivo.
Vía: Fastcompany
