La historia contemporánea de BMW está evolucionando a un ritmo bestial. Atrás ha quedado aquella gama de modelos compuesta por sólo unas pocas «series» (para entendernos). Los tiempos han cambiado, y la actualidad presenta a la marca bávara con una tremenda oferta a un mercado muy, muy amplio.
Con esta perspectiva de presente y también de futuro, la marca de Múnich ha confirmado que van a simplificar las cosas tanto para ahorrar costes, como para potenciar la capacidad de evolución de sus modelos y que ninguno se quede atrás. Por ello mismo, van a establecer con el tiempo dos únicas plataformas, que será el chasis de tracción trasera, y el chasis de tracción delantera. ¿Qué te parece?
Mayor número de componentes y piezas compartidas
La «peor parte» por llamarla de alguna manera, será que buena parte de los modelos en la casa compartirán piezas entre los mismos, incluyendo también del habitáculo. Será un dato interesante ya que no tiene porqué ser negativo, sino positivo de cara a recambios, ahorro de costes… el hecho de simplificarlo todo y poder ofrecer un chasis que sea tan versátil, parece interesante. Y digo versátil porque por ejemplo, del Serie 2 al X6 hay un salto muy notable en tamaño y necesidades mecánicas, pasando por toda la gama (Serie 3 y 4, Serie 5 y 6…), además de las versiones de alto rendimiento.
Por otro lado, el chasis de tracción delantera servirá para aumentar la gama de modelos más accesibles de la marca, más allá del recién presentado Serie 2 Active Tourer. Yendo más allá, sí habrá chasis independientes en la submarca «i», por cuestiones más que obvias.