Hace año y medio e incluso dos años, los rumores en torno a un superdeportivo o superexótico por parte de BMW estaban a la orden del día. Con el Audi R8 en su máximo apogeo, no eran pocos los que querían ver un rival por parte de la casa bávara, algo que incluso dio dolores de cabeza a BMW.
Sin embargo, con el paso del tiempo todo ha terminado por aclararse… y nos quedamos igual que estamos. El fabricante alemán con sede en Münich lo ha dejado claro, y la situación seguirá el curso que tenía previsto.
No desarrollarán un nuevo superdeportivo, ni siquiera un competidor «medio» del Audi R8 o del Mercedes SLS AMG Gullwing. Será prácticamente el único fabricante premium alemán sin uno en sus filas, y si bien a priori puede ser algo negativo para ellos, desde BMW tienen una posición clara y contundente al respecto.
Concretamente, BMW afirma que el espíritu de la división M es desarrollar deportivos de muy alto nivel, con la capacidad de ser coches aptos para el uso diario, y sin que se comprometa en términos generales su uso cotidiano. Es decir, no quieren un exótico en sus filas. Curiosamente, desde BMW recuerdan que el M3 E92, un coupé deportivo de uso diario, está a la par con el Audi R8 V8 estándar.