Con motivo de la celebración del CES en Las Vegas, los de Múnich presentan el BMW i8 Mirrorless como un ejercicio de diseño y de futuro que podría adelantarnos en cierto sentido cómo podrían ser las tecnologías más avanzadas en la casa bávara en menos de lo que imaginamos. Como su propio nombre indica, el BMW i8 Mirrorless derivad del i8 estándar y se caracteriza por prescindir de cualquier tipo de espejo retrovisor. En su lugar, se instalan dos potentes cámaras, una en cada espacio dedicado al espejo retrovisor, y transmitiendo toda la información al interior del habitáculo.
El aspecto exterior del BMW i8 Mirrorless es curioso e interesante. No vamos a entrar en el avance que puede suponer o no a simple vista el uso de cámaras digitales de alta resolución como sustituto de los espejos tradicionales, pero tal y como lo BMW lo plantea, hace que la idea parezca cuanto menos, interesante.
BMW lo afirma: la visibilidad es mucho mayor
El BMW i8 Mirrorless combina un total de tres cámaras diferentes para unir las imágenes y mostrarlas en tiempo real en una pantalla interior que se instala en el lugar donde se instala tradicionalmente el espejo retrovisor interior. Según la marca alemana, de esta manera la visibilidad que se obtiene es de mayor calidad y ofrece mayor ángulo de visión, aumentando así la seguridad. ¿Qué te parece? Como apunte interesante, junto a las cámaras BMW instala un sistema de triángulos de emergencia que avisan primariamente al conductor cuando se aproxima a un peligro como por ejemplo, un cambio involuntario de carril.
No podemos pasar por alto el gran uso que BMW está llevando a cabo con el i8 para promocionar nuevas tecnologías o presentar prototipos derivados del mismo para mostrarlas. Después de todo, la importancia que los bávaros están otorgando a la submarca «i» es cada vez mayor, y el i8 continuará siendo el máximo representante.
