El BMW Serie 8 representa una de las apuestas más importantes que la marca bávara va a llevar a cabo en lo que resta de década. No porque se posicione como una de las mayores promesas de venta, ni porque escenifique un gran objetivo de ganancias, sino por la imagen y lo que representará en la gama de BMW. Tres variantes diferentes se alzarán muy pronto en el mercado, y una de ellas, contará con cinco puertas.
Anticipado con este prototipo, el BMW Serie 8 Gran Coupé será una berlina-coupé de alto lujo y ofrecerá grandes dosis de deportividad. Poco tendrá que ver con el modelo que llevó el mismo nombre en los años noventa, pero sí tendrá -y mucho- que ver en lo que representará en la línea de modelos de BMW. La idea es reemplazar y mejorar el concepto del Serie 6 de la misma categoría, ofrecer un diseño más dinámico y llamativo, y apostar por un mercado similar, pero que ha evolucionado en estos últimos años. Para ello, las similitudes con el prototipo que tenemos en pantalla serán totales, y por supuesto, habrá una versión full M.
Cuando el BMW Serie 8 Gran Coupé llegue al mercado durante el próximo año 2019, está previsto que la gama de motorizaciones cuente con al menos tres opciones diferentes, un diésel y dos gasolina. Mimetizará las motorizaciones disponibles del Serie 8 Coupé: un diésel de 320 caballos de potencia -denominado 840d xDrive, y dos gasolina de 530 y 650 cv, correspondiendo al M850i xDrive y al M8 Gran Coupé, respectivamente. Es muy posible que por entonces, BMW dote a la gama del Serie 8 de una opción gasolina de menor potencia, denominada 840i, que se sitúe en torno a 450 caballos.
