Ahora sí: el motor W16 de cuatro turbocompresores nos dirá adiós tras 20 años de historia con el Bugatti W16 Mistral. Una auténtica obra de ingeniería que quedará en el recuerdo de la marca por su inminente electrificación
El W16 Mistral es el primer roadster de la marca desde que el Veyron Grand Sport Vitesse culminase su producción en 2015. Además, su nombre también te resultará familiar, puesto que es un nombre que usó Maserati en los años 60. Sin embargo, el origen del nombre tiene un por qué: Mistral es el poderoso viento que sopla desde el valle del río Ródano a través de las ciudades de la Costa Azul en el sur de Francia. Y debido a que se trata de un modelo sin techo, el matrimonio entre ambos es más que razonable.
¿Qué han preparado para la despedida de éste motor? Nada menos que el W16 de 8.0 litros con 1.600 CV y 1.600 Nm de par procedente del Chiron Super Sport 300. Bugatti tiene claro que quiere hacer el descapotable más rápido del mundo como ya hiciese con el Grand Sport Vitesse en 2013 con 409 km/h.
Su estética se ha inspirado en el Type 57 Roadster Grand Raid de 1934 sin buscar ser un diseño retro, con detalles como la combinación bitono de la carrocería o el parabrisas delantero con una gran inclinación que simula ser una visera. Otro detalle importante son las tomas de aire del radiador de aceite y ahora se encuentran en el techo, tras los asientos. Estas tomas además están hechas en fibra de carbono a medida, capaz de soportar el peso del automóvil en caso de vuelco para proteger así la cabeza de los ocupantes.
Se fabricarán tan sólo 99 ejemplares a un precio de 5 millones de euros por cada una de ellos y cuyas entregas están prevista comenzar en el año 2024. Si por alguna de aquellas tenías pensado hacerte con una de ellas tenemos malas noticias: la producción ya está vendida y comenzarán a entregarse las primeras unidades a partir del año 2024.
