Poco a poco los preparadores van apostando por el nuevo Land Rover Defender, si bien todavía siguen teniendo muy puesta la vista en su antecesor dado que sus posibilidades son casi infinitas. Carlex Design es uno de los primeros en atreverse nuevamente con un tratamiento para el nuevo Defender -ya lo hizo recientemente con el Defender Yatching Edition-, y a decir verdad, han sacado la artillería pesada.
Para empezar, lo han pintado del mítico verde British Racing Green como buen coche británico. Pero ahí no queda la cosa en su exterior: se añaden unos pasos de rueda sobredimensionados en fibra de carbono, carcasas en los retrovisores, así como protector de la rueda de repuesto y cubiertas en el capó también en el mismo material. También se añaden unas bandas de color blanco que recorren longitudinalmente el vehículo y llegan incluso a la rueda de repuesto.
En su interior, encontramos unos llamativos asientos Recaro Sportster, pilares tapizados en Alcantara negro, volante remozado, placa identificativa de la serie limitada, detalles en color verde, tapicería en piel marrón con la banda ‘Racing Green Edition’ en la parte central de los mismos así como salpicadero con detalles en fibra de carbono y emblema de Carlex.
Eso sí, aún pese a lo llamativa que resulta su nueva estética -tanto interior como exterior-, parece que Carlex no ha querido en esta ocasión alterar la potencia de su gama de motores, por lo que se mantienen invariables.
