El sector automovilístico es una de las mayores industrias a nivel mundial. Año tras año salen al mercado nuevos vehículos con funcionalidades que los hacen muy atractivos para los conductores. Sin embargo, a la hora de adquirir un vehículo siempre surge una duda, ¿compro un coche nuevo o un coche de ocasión? La respuesta a esta pregunta es difícil de responder y depende de cada situación de forma particular. Hay personas que aman el olor a coche nuevo y la sensación de conducir un coche por primera vez, sin embargo, hay otros que prefieren la posibilidad de poder cambiar de vehículo a menudo. En la actualidad, los vehículos se quedan rápidamente desfasados, por lo que un modelo puntero de hace tres años es posible que hoy se haya quedado anticuado. Otro aspecto a tener en cuenta es el consumo energético. Muchas personas tienen en cuenta si su coche consume gasolina o electricidad, por lo que la huella de carbono es un punto muy importante en la decisión de los conductores. Este es el argumento principal de los defensores de los coches nuevos, ya que buscan coches que ofrezcan fiabilidad mecánica y además consuman lo mínimo posible. En concesionarios como Grupo M Gallego, te facilitan la decisión al tener una amplia ama tanto de vehiculo nuevo de marcas como Kia, Subaru, Ssangyong y Mitsubishi, así como vehículos de ocasión. En este artículo, vemos los puntos a favor y en contra de adquirir un coche nuevo o de segunda mano.
Comprar un coche nuevo, pros y contras
Para muchas personas, el olor a coche nuevo es una de las mejores sensaciones en la vida. Poder conducir un coche por primera vez sabiendo que nadie lo ha conducido nadie es una experiencia muy agradable para muchos conductores. Y es que a todos nos gusta estrenar algo, pasa igual con la ropa. No es lo mismo comprarse una camisa que heredar la de un familiar, ya que la sensación de exclusividad no es la misma. A parte de esto, una de las ventajas principales de adquirir un coche nuevo es la garantía que nos ofrece. Al estar recién fabricado, el coche cuenta con las últimas piezas y técnicas de ingeniería disponibles en el mercado. Esto es garantía de que será fácil encontrar piezas de recambio en caso de avería y que en ese caso, será reparado con la mayor celeridad posible. Otra de las razones principales es la seguridad. Si vas a viajar con tu familia, quieres un coche que cumpla todas las garantías de seguridad y en el que todos los integrantes puedan viajar con total tranquilidad, por lo que elegir un nuevo modelo puede ser una opción acertada. Por último, comprar un coche nuevo permite pedirlo completamente personalizado, adquiriendo un coche a la carta con todas las opciones que deseas y evitando aquellas que no vas a necesitar.
Comprar un coche antiguo, pros y contras
Aunque a todos nos gustaría estrenar un coche de vez en cuando, a veces simplemente no es posible. Una de las razones principales por la que adquirir un coche de ocasión es el precio reducido. Los coches, una vez salen del concesionario, pierden valor progresivamente. Se estima que tras dos años, el coche pierde hasta un 30% de su valor, aunque el precio depende del estado y también del kilometraje. Por esta razón, adquirir coches de ocasión resulta una opción muy interesante para muchos conductores, ya que pueden adquirir vehículos que no se podrían permitir de primera mano. Aunque un coche de ocasión tiene menos vida útil, uno de los puntos a favor es que ofrecen más rotación, es decir, permiten cambiar de coche más a menudo. Esto puede ser conveniente si por circunstancias profesionales o familiares debas cambiar de domicilio a menudo, por lo que no tendrás que realizar grandes compromisos en lo que al coche se refiere. Comprar coches de segunda mano nos permite acceder a una gama de coches superior, como monovolúmenes familiares y 4×4, una gama de coches muy interesantes que de otra forma sería más complicado adquirir.
El mercado del automóvil avanza a una velocidad desorbitante. Solo es necesario ver la cantidad de visitantes que congregan las exposiciones y congresos de vehículos. Cada año salen soluciones para nuestros coches que contribuyen a una mejor conducción, seguridad y respeto por el medio ambiente. Sin embargo, aunque a todos nos gustaría, a veces no es posible adquirir un coche de primera mano. Esta decisión está muy ligada con el modo de vida que deseamos llevar. Si pensamos asentarnos en un lugar de forma estable y con responsabilidades familiares, quizás un coche nuevo es una buena inversión. Sin embargo, si no tenemos certeza laboral en un lugar concreto, quizás un coche de segunda mano puede resultarnos muy útil. La diferencia principal es el precio del vehículo, que, aunque en ambos casos es posible de financiar en entidades como BBVA, los plazos y mensualidad pueden variar bastante en ambos casos. Lo importante es estudiar correctamente nuestra situación económica antes de efectuar la compra del vehículo.