Por desgracia los últimos días han sido protagonizados por desastres naturales demasiado crueles, tanto que han dejado en un segundo plano los desastres provocados por la humanidad. Japón esta sufriendolo todo de una vez, terremoto, tsunami, explosiones nucleares y por si fuera poco, un volcan que ha estado 50 años inactivo le ha dado por unirse a la destrucción del país.
¿Pero alguien se ha parado a pensar que hacer en caso de terremoto estando al volante conduciendo? El principal problema es que los terremotos suaves provocan movimientos relativamente inapreciables en el coche, pues se pueden interpretar como irregularidades de la calzada. En caso de sacudidas más fuertes, el primer pensamiento suele estar relacionado a un fallo mecánico o similar.
En cualquier caso, si tienes la sangre fría de percatarte de un seísmo al volante y eres capaz de descartar fallos mecánicos e irregularidades del suelo, debes actuar rápido. No es buena idea seguir conduciendo pues aunque te encuentres seguro en la calzada, puede que otros elementos se interpongan en tu camino. Lo mejor es intentar parar en un sitio seguro y abierto, evitando quedarse en lugares de mayor peligro, cerca de tendido eléctrico, edicificios con voladizos, puentes, túneles, cerca de farolas, etc. Aunque suene obvio, se trata de usar el sentido común para asegurar la seguridad personal y la de los ocupantes del vehículo, intentando permanecer dentro del vehículo todo el tiempo.