BMW apunta alto con la submarca «i», esto ya no es ningún secreto. En poco más de un año hemos visto lo que hasta hace muy poco parecía un sueño, pasar a ser realidad. Con el i3 y el i8 la firma bávara demuestra querer estar en lo más alto en un mercado emergente y apasionante, y las posibilidades son… casi infinitas.
Durante este verano hemos escuchado en más de una ocasión rumores y supuestas informaciones en torno a un hipotético BMW i8 de 4 puertas, también denominado i9. No puedo negar que suena interesante, y a grandes rasgos puede que llegue a prometer ser un verdadero éxito en el mercado. Más allá del Tesla Model S, la competencia es mínima. Por ahora, eso sí.
El diseño y la filosofía, mayores incógnitas
En esta ilustración de nuestro amigo Teófilo, el i8L (como él lo llama) parte del diseño y aerodinámica original del eléctrico alemán, optando por una configuración de cuatro puertas tradicional. No quiero cerrar la puerta a que en BMW opten por un diseño más futurista y que no se aleje de la perspectiva coupé del i8, ya que aquí la información es muy escasa y no sabemos más que será muy, muy eficiente.
Además de un i8 más grande, espacioso y con dos puertas más, también comienzan a llegar informaciones que abarcan la posibilidad de un i8 totalmente eléctrico, de tecnología similar al i3 y prescindiendo del motor de combustión interna. Lejos de ser una versión de alto rendimiento o mayor potencia, puede posicionarse como todo lo contrario.
Mirando al futuro, el BMW i8L o i9 debutará el próximo año y lo hará con la misma mecánica que el i8 estándar, incluyendo posibles cambios técnicos o de menor importancia. La potencia será de 362 caballos en combinación con el motor eléctrico, permitiendo la posibilidad de ser tracción trasera, total o delantera, según el motor o sistema que se utilice.
