La tecnología de conducción autónoma es cada vez más inminente en las carreteras abiertas al tráfico. Aunque son ya varias las marcas las que han anunciado sus intenciones de contar con coches con tecnología de conducción autónoma en la calle para finales de la década presente, Tesla, fue precisamente una de las primeras en anunciar dichas intenciones. Y teniendo en cuenta todas las patentes que tienen en su haber hasta la fecha y los modelos que tienen en comercialización, nadie pone en duda que logren esa meta.
Estando ya con un pie en 2016, Elon Musk, en unas declaraciones a Fortune, ha anunciado que en el año 2018 veremos en el mercado Tesla con tecnología de conducción autónoma. Actualmente ya están perfilando dicho concepto con la una tecnología de conducción semiautónoma (Autopilot 7.0) que permitía automatizar ciertos patrones de la conducción en determinados casos, pero en ningún caso supone la conducción autónoma en su máxima expresión, puesto que básicamente lo que hace es establecer una velocidad de crucero y encargarse de que el coche se mantenga entre las líneas de la carretera.
¿Qué supone esto? que los vaticinios iniciales encaminados hacia el año 2020 como el despliegue de dicha tecnología se adelantaría hasta el 2018. Tal y como afirma Elon Musk, «creen tener todas las piezas, únicamente falta afinarlas y colocarlas en el lugar adecuado, además de asegurarse que funcionan en un amplio número de situaciones de forma correcta». Es innegable los grandes avances que han hecho tanto Tesla como el resto de compañías en este ámbito, con prototipos rodando desde hace tiempo en carreteras abiertas al tráfico para seguir puliendo la tecnología de cara a su aterrizaje comercial.
Pero aparte de todo esto, también queda mucho camino por recorrer en el marco legislativo y no dejarse sugestionar por el desconocimiento de su funcionamiento a la hora de legislar. La prueba está en resultados como los logrados por Google con sus prototipos autónomos en carreteras abiertas al tráfico, aún siendo meros prototipos y no unidades finales destinadas a su comercialización.
¿Pecarán de ambiciosos desde Tesla? ¿o en su lugar será una de las primeras marcas en dar el campanazo?