Cada vez más, estamos viendo apuestas más fuertes por fabricantes de baja tirada o de nuevo cuño por superdeportivos eléctricos que prestacionalmente son capaces de aniquilar al grueso de superdeportivos existentes en la actualidad. Y, de forma paralela, también están logrando -o al menos, anuncian- una autonomía considerablemente superior a la que podemos encontrar también en el grueso de coches eléctricos terrenales.
Dubu Motors, un fabricante de Quebec (Canadá) ha sido el último en subirse al carro anunciando un superdeportivo eléctrico que esperan poder llevar a producción en el año 2018. Si bien, el anuncio no es ni mucho menos nuevo, puesto que ya en 2014 anunciaron sus intenciones de fabricar un superdeportivo eléctrico, pero no ha sido hasta ahora cuando han dado a conocer muchos detalles sobre el mismo.
Tal y como anuncian, cuenta con una potencia de 811 CV y 1.356 Nm de par motor extraídos de su paquete de baterías de iones de litio con capacidad de 100 kWh y cuatro motores eléctricos (uno en cada rueda) capaz de generar 1,2 G de fuerzas laterales. Realiza el 0-96 km/h en tan sólo 2 segundos y su autonomía oscilará los 600 kilómetros, lo cual no está nada mal si tenemos en cuenta que nos movemos en cifras ya de un turismo con motor térmico.
Generalmente, en los eléctricos el peso del conjunto debido a sus baterías suele dispararse de manera considerable, en este caso y para contrarestar ese efecto, lo que han hecho ha sido apostar por un chasis en fibra de carbono (material que encontramos también en su carrocería), computando un peso final de 1.928 kg, en el que además, cuenta con un reparto 50/50 entre ejes.
Su habitáculo tiene capacidad 2+2, las cuales, podrán albergar su equipaje en cualquiera de los dos maleteros con los que cuenta (uno en la parte frontal y otro en la zaga, si bien, no conocemos el cubicaje de los mismos).
Los planes, como comentábamos, son de llegar al mercado en 2018 a través de un proceso de crowdfunding en el que se están apoyando para lograr el ambicioso objetivo.
