No es el primer Safety Car eléctrico del Grupo BMW (en Marzo presentaron el Formula E), pero sí el primero de la firma. Se trata del i4 M50, que llega como el primer Safety Car puramente eléctrico de la firma y que presumiblemente abre la veda a que no volvamos a ver modelos de combustión como Safety Car por parte de BMW.
Si bien se ha presentado ya, no será hasta el GP de Australia en el 15 de Agosto en el circuito Spielberg donde podremos verlo en acción, sustituyendo de esta forma al BMW i8 Safety Car. Además, el modelo en el que se basa todavía no está disponible en el mercado, ya que no aterrizará hasta el mes de Noviembre.
Este modelo está desarrollado por el departamento BMW M GmbH y cuenta con dos motores eléctricos, uno delante y otro detrás, dando una potencia total combinada de 544 CV (406 kW), por tanto, dispone de tracción total. No falta una puesta a punto de chasis con frenos de mayor capacidad, mejoras aerodinámicas y otras tecnologías M para su chasis. Consigue realizar el 0-100 km/h desde parado en 3,9 segundos con una velocidad máxima de 225 km/h.
Además, gracias a sus baterías de 80,7 kWh de capacidad neta, puede recorrer hasta 510 kilómetros y se pueden cargar en tomas de hasta 210 kW, necesitando únicamente de 10 minutos para lograr 140 kilómetros de autonomía.
Estéticamente cuenta también con una combinación de colores con un gris oscuro como color principal junto con elementos de color verde a contraste, incluyendo los polémicos riñones delanteros, que debido a este color resultan todavía más llamativos si cabe.
