Hace ya unos meses en MotorAdictos anunciamos de forma oficial el cese programado de la producción del BMW i8 tanto en guisa coupé como roadster. Más de un lustro después, será el próximo mes de abril cuando la marca alemana eche el cierre definitivo a la cadena de montaje del deportivo «eficiente» de Múnich y asentarán las bases para un futuro que se prevé mucho más prometedor y excitante.
Desde el fabricante alemán ya confirmaron en alguna ocasión que no se prevé que el BMW i8 tenga un sucesor directo, realmente no habrá un sustituto como tal sino que la línea de desarrollo seguirá la filosofía de otras marcas tales como Mercedes-AMG con su deportivo puntero (recordemos que el AMG GT no es un sucesor directo del SLS AMG Gullwing). Es aquí donde entra en juego proyectos tales como el prototipo Vision M Next Concept -en pantalla-, que estéticamente tiene muy poco que ver con el i8.
El nuevo deportivo insignia de BMW se condicionará como un guiño a las tecnologías eficientes y a la búsqueda de altas dosis de deportividad y capacidades dinámicas a la par que se concierne un compromiso importante con el medio ambiente. No está claro si BMW optará por un sistema de propulsión únicamente eléctrico, motor gasolina y eléctrico… teniendo en cuenta los rivales que se plantean en el horizonte, teniendo como cúspide este segmento el nuevo Tesla Roadster, que llegará al mercado en aproximadamente un año, las posibilidades son muy amplias. El reto, también lo es: BMW necesita un superdeportivo eficiente capaz de ser endiabladamente rápido, y ofrecer altas dosis de autonomía.
