El título no es literal, ¡menos mal! sino más bien una metáfora. Siempre he pensado que si hay un sonido de un coche que se acerque a la perfección de la música celestial, es el Carrera GT, aún reconociéndolo, siendo ferrarista.
Pero evidentemente, los afortunados poseedores del Porsche más rápido de la historia (con perdón del 997 Turbo y del viejo GT1) puede que no se conformen con el sonido que trae de serie, y un buen ejemplo es este vídeo, que, aún teniendo ya su tiempo, siempre merece la pena volver a verlo.
Dejando a un lado la gracia de los que lo llevan, es curioso ver cómo cambia el sonido cuando se introduce una línea de escape modificada (AWE), y que, no sé vosotros, pero para mí sólamente mete ruido, pierde la esencia.
Mención al minuto 1:50, un viandante tiene un curioso shock tras escuchar al CGT acelerar…
Vía: Youtube