Desde Autocar nos llegan nuevas informaciones sobre el proyecto conjunto que se traen entre manos BMW y Toyota para desarrollar un vehículo deportivo. El biplaza tendrá una doble misión: en la casa alemana dará relevo al actual Z4, mientras que en la japonesa volverá a dar vida al mítico Supra.
La principal novedad reside en el propulsor que montarán los deportivos que nazcan de la colaboración. Todo apunta a que tendrán una configuración de motor delantero y tracción total, que combina un motor de gasolina con dos eléctricos alimentados por supercondensadores, cuya tecnología deriva de la experiencia de Toyota en el desarrollo de su LMP1 de Le Mans, ya utilizada en el concept Yaris Hybrid R.
Un sistema híbrido muy especial
La decisión de usar supercondensadores y no baterías de iones de litio, se ha tomado buscando un sistema que fuera más pequeño y ligero de lo convencional, con una capacidad de absorber y descargar energía cinética de forma muy rápida. Esto se traduce en la capacidad de aportar un extra de potencia considerable para breves periodos de tiempo, con la capacidad de volver a cargarse rápidamente con la propia energía generada con el movimiento.
El motor de combustión, que no superará los dos litros de cilindrada, será producido por BMW, al igual que los motores eléctricos, éstos últimos bajo las especificaciones de Toyota. El chasis estará construido en acero y aluminio de alta resistencia, combinados con la fibra de carbono en alguna de sus secciones.
Pese al desarrollo conjunto, ambos modelos tendrán aspectos diferenciados, tanto en el exterior como en el interior, adaptándolos al lenguaje de diseño de cada marca.
Vía: Autocar
