Realmente no es ninguna novedad, ¿no crees? A estas alturas estas son las expectativas que el totalmente nuevo inglés aporta a los informes de Rolls Royce, y es que el Ghost es mucho más de lo que parece.
Dado la reducción considerable de tamaño que ofrece se abarca a un público mucho más amplio que no quiere una monstruosidad como un Phantom, pero sí un Rolls elegante y grande. Ese buque insignia será el Ghost, y las previsiones son de lo más interesantes.
Además de haber aumentado las horas de trabajo y la productividad de las plantas aún sin haber empezado la producción, está previsto que la plantilla de empleados se aumente hasta en más de 150 personas, y por supuesto los beneficios a la larga sean importantes.
Vía: Motor Authority