Parece que fue ayer, pero en 2016 cesó la producción del Defender y el interés en el modelo no sólo no ha decaído, sino que ha aumentado pese a contar con un relevo generacional cuya filosofía dista a muchos niveles del modelo original.
Siendo consciente de ese interés, desde Land Rover a través de la división Works Bespoke han optado por modernizarlo tomando como base vehículos donantes del 2012 al 2016.
Disponible en carrocerías 90 y 110, estas unidades han sido totalmente restauradas a mano según la firma por ingenieros de Land Rover Classic. El exterior puede ser elegido por el cliente, además de haber varios diseños de parrilla delantera disponibles (Heritage, Standard y Adventure), además de contar con nuevas luces LED. Las llantas pueden ser unas Wolf en 16 o Sawtooth en 18. El exterior también se puede personalizar con estribos laterales, una baca, una jaula de expedición, una escalera, luces LED montadas en el techo y un cabrestante. Otras opciones incluyen el Adventure Pack con una tienda de campaña montada en el techo y la conversión más extensa de Ply Guys Camper, que transforma el Defender en una verdadera casa rodante.
El interior se ha puesto al día tapizándolo en cuero, ya sea monocolor o bicolor. También se pueden elegir los asientos a gusto del cliente, con unos más confortables o en su defecto unos Recaro más deportivos y con mayor agarre lateral. La consola central sigue manteniendo el aspecto original, añadiendo una radio de 3,5″ con Bluetooth, navegador y Radio DB. También, el selector del cambio de marcha es nuevo y cuenta con acabado en negro brillo.
El motor elegido es el V8 de 5.0 litros y 405 CV asociado a un cambio ZF de ocho velocidades enviando la potencia a las cuatro ruedas. La suspensión ha sido revisada por Eibach con nuevos muelles, barras estabilizadoras así como amortiguadores, buscando un mayor confort en carretera. También, los frenos se reemplazan por unos Alcon de cuatro pistones con discos de mayor tamaño en ambos ejes.
Y… ¿cuál es su precio? 190.000 libras esterlinas (sin impuestos), es decir, cerca de 225.000 euros al cambio actual para la carrocería Station Wagon 90. Si queremos la Station Wagon 110 de cinco plazas, necesitaremos desembolsar 199.000 libras esterlinas sin impuestos (236.000 euros). Y si quieres esta última con siete plazas, necesitarás 204.000 libras esterlinas (sin impuestos), o lo que es lo mismo, 242.000 euros al cambio de divisa.