No es ningún secreto que el Nissan GT-R es un coche cerrado, monopolista y cabezota como él solo, dejando al margen sus excelentísimas prestaciones y sus impresionantes cualidades dinámicas sobre el asfalto.
Entre otras cosas, el GT-R cuenta con limitaciones como no poder exceder los 180 Km/h (dicha limitación se desactiva al entrar en circuitos a los que Nissan les ha dado el visto bueno). No sólo eso, una vez entrado al circuito, debes ir al Centro de Alto rendimiento de Nissan a hacerle una revisión de 1.000 dólares, ya que de lo contrario, si no se la haces pierdes la garantía. Eso, sin contar con los sensores montados en la válvula de los neumáticos.
Era de esperar, que con el arte que tienen algunos preparadores japoneses, no tardaran mucho en salir modificaciones para evadir estas imposiciones tan ridículas sobre lo que podría ser uno de los deportivos más perfectos de los últimos tiempos, y que no lo es por el motivo mencionado.
Entre otras cosas, una de las modificaciones más esperadas y que ya ha salido es un dispositivo de HKS -denominado VAC- que una vez se conecta a la ECU elimina el límite de velocidad de 180 Km/h. Aunque su precio no es nada barato, dicho sea de paso: 120.000 yenes (750 euros).
Por otra parte, MCR ha sacado unas levas para el volante realizadas en fibra de carbono que no quedan fijas al girar el volante, algo que más de un intrépido propietario del GT-R agradecerá.
Finalmente, BBS también ha sacado unas llantas de edición limitada que no interfieren con los sensores colocados en las ruedas por Nissan y que se denominan LM-DBK-P de 20×9.5 pulgadas -delante- y 20×10.5 -detrás-. Su coste es de aproximadamente 3.000 euros.
Vía: Autoblog.com