Uno de los 1.580 ejemplares fabricados del Porsche 911 Carrera 2.7 RS pertenecía a la extraordinaria colección que poseía Paul Walker y de la que todavía siguen apareciendo con cuentagotas vehículos que salen a subasta. El protagonista de la subasta de hoy es precisamente ese mismo Porsche del que hablamos.
El 911 Carrera RS 2.7 es un coche muy especial, ya que se trata de un modelo desarrollado a comienzos de los años 70, cuya producción arrancó en el año 1973 y que en su día fue el coche alemán de producción más rápido del mundo, gracias a su motor de 2.7 litros bóxer con con 210 CV y una caja de cambios manual de cinco velocidad, con un 0-100 km/h cercano a los 6 segundos y una velocidad máxima de 239 km/h.
La unidad en cuestión salió de la fábrica de Stuttgart en Marzo de 1973 en color amarillo con la tapicería en cuero negro. El coche no ha sido modificado, aunque sí restaurado, concretamente por Jerry Woods Enterprises para el exterior y Autobahn Interiors para tapicería e interior.
Recordemos que este modelo cuenta con numerosas soluciones enfocadas a la reducción de peso, tales como unas ventanillas más delgadas, paneles de carrocería de menor grosor que los de un 911 convencional, plataforma trasera en fibra de vidrio y alerón de cola de pato con el logotipo Carrera RS. Su estética se complementa con unas llantas Fuchs y pasos de rueda ensanchados.
Esta unidad cuenta con 58.268 millas (93.774 kilómetros), que si bien no es un kilometraje tan bajo como el que acostumbramos a ver en este tipo de vehículos, no será óbice para que su precio pueda rebasar el millón de dólares en la subasta.
