Audi actualizó recientemente el SQ7 TDI, tomando como base el SQ7 TDI lanzado en 2016 y añadiendo cambios en su exterior, interior además de mejoras en su equipamiento. Se trata del modelo más potente y deportivo de la gama Q7, movido por un V8 diésel con turbocompresor y compresor eléctrico que sirve para asistir al turbocompresor y mejorar su rendimiento a bajas vueltas, capaz de arrojar una potencia de 435 CV y 900 Nm de par máximo entre las 1.250 y 3.250 rpm.
Con él es capaz de alcanzar desde parado los 100 km/h en 4,8 segundos con una velocidad máxima limitada electrónicamente a 250 km/h. De acuerdo al ciclo WLTP, su consumo es de 9,1l/100 km equivalente a unas emisiones de CO2 de 239 g/km. Va exclusivamente asociado a la tracción total quattro y la caja de cambios tiptronic de ocho velocidades.
Su enfoque es más deportivo que el resto de sus hermanos de gama, como ya nos anticipa su nombre. Es por eso que de serie cuenta con una suspensión neumática deportiva y dirección progresiva, pudiendo además complementarlo de manera opcional con dirección a las cuatro ruedas, frenos carbocerámicos, diferencial deportivo y un sistema de estabilización activa antibalanceo.
Para justificar su elevado precio de tarifa, su dotación de serie es muy completa, encontrando llantas de cinco radios y 20 pulgadas (con neumáticos 285/45), faros Matrix LED, MMI Navegación plus compatible con la tecnología 5G, alarma antirrobo, sistema ‘Audi parking system plus’, asientos delanteros deportivos con reglajes eléctricos, entre otros elementos. Opcionalmente podremos complementarlo con una tercera fila de asientos (7 plazas), Matrix LED con luz láser, iluminación ambiental en 30 colores ajustables, asientos deportivos S plus con tapicería en cuero Vaclona con función de masaje y calefacción o climatizador de cuatro zonas.
Su precio arranca en los 114.050 euros y ya está disponible.