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Sin duda, uno de los grandes alicientes del Toyota GT 86 por su configuración (RWD, diferencial autoblocante, peso contenido y reparto del mismo) era que era un coche idóneo para practicar drift. El piloto Ken Gushis muestra con una unidad del GT 86 de lo que es capaz.
La pista desconocemos cuál es, sí que podemos apreciar que está lloviendo y eso es algo que facilita enormemente el trabajo a la hora de hacer drift, si bien es más complicado «hacer metros» debido a que los neumáticos no tienen el mismo agarre que en seco.
Naturalmente, y tal y como era de esperar, el piloto lo lleva con suma facilidad por la pista. Es posible que muchos os cuestionéis por qué tira de freno de mano, a lo que os contestaré que es algo completamente normal cuando se hace drift, principalmente con dos objetivos: alargar la trazada mientras estás cruzado, o entrar cruzado directamente antes de entrar a la curva sin necesidad de hacer la maniobra del péndulo.