La Comisión Europea continúa a vueltas con los aranceles a los vehículos eléctricos producidos en China. Las cifras anunciadas previamente se han revisado y tras dicha revisión, Tesla sale beneficiada.
La firma norteamericana cuenta con su mayor fábrica en China (cuya capacidad de producción es de 900.000 unidades anuales) de la que no sólo salen unidades para abastecer la mercado interno, sino también al mercado europeo.
En las tablas publicadas inicialmente, Tesla tendría que pagar un arancel del 20,8% por exportar sus vehículos fabricados en China a la UE, pero finalmente esa cifra se ha ajustado y se reduce hasta el 9%. Recordemos que los Model 3 y el Model Y en sus versiones de acceso vienen desde China.
La UE también ha ajustado la tarifa arancelaria de BYD y ahora pasará a contar con un impuesto del 17%, mientras que Geely contará con un 19,3% (en Junio la propuesta era del 17,4% y 19,9% respectivamente).
Por su parte, el resto de fabricantes chinos que cooperaron en la investigación pero no se incluyeron en ella tendrán un arancel del 21,3% en lugar del 20,8% como se sugería inicialmente. Esto supone que CUPRA tendrá que pagar ese 21,3% para poder importar el Tavascan a Europa.
¿Cuál será el impacto de estas medidas? Si bien conseguirán que muchos fabricantes establezcan aquí sus fábricas para esquivar los aranceles, lo cierto es que en el corto y medio plazo van a suponer un varapalo para la transición energética, especialmente a la de los vehículos eléctricos baratos, de donde algunas propuestas ya vienen de China.