Cuando El Grupo VAG y Bugatti comenzó aquel ambicioso proyecto, los ojos de todos los ingenieros brillaron como nadie. Todo el equipo se volcó, y lo que un día eran interminables problemas de motor, hoy es un super éxito en ventas. Hablamos, cómo no, del Bugatti Veyron.
El superdeportvo a estas alturas ya ha llegado a la enorme cifra de las 220 unidades vendidas, concretamente 132 unidades descansando en el garaje de su legítimo propietario (excepto alguno de ellos que haya tenido un accidente), y el resto de las 88 unidades están vendidas pero aún por construir. ¿Qué podemos sacar de esta conclusión? Definitivamente, Bugatti no está perdiendo tanto como se esperaba con el Veyron, En un principio se pensó en pérdidas mucho más grandes, pero todo parece indiar que va a alcanzar la meta de las 300 unidades, la que inicialmente se propuso.
Por supuesto, una vez llegue a las 300 unidades, la producción se detendrá. Hasta entonces seguiremos viendo versiones especiales y demás exclusividad pura y dura, y por supuesto también unidades de clientes.
Vía: Autoblog
