Pensando en aquellos clientes que quieren una apariencia deportiva pero que por sus necesidades o presupuesto no quieran tener que optar a motores potentes y gastones, Ford ha introducido en el mercado los Fiesta y Focus con el acabado ST-Line, en los que nos permite acceder a la estética de los Fiesta ST y Focus ST a un precio muy inferior. En Volkswagen encontramos la misma solución bajo el acabado R-Line, Peugeot con RC Line o Renault con GT Line.
Para ello, se dota a ambos modelos de suspensión deportiva rebajada en 10mm, parrilla delantera de tipo panel de abeja, llantas de 17 pulgadas de color ‘Rock Metallic Grey‘ en el caso del Focus y de 16 pulgadas en el caso del Fiesta, juncos de los antinieblas de color negro, difusor y alerón trasero, emblemas ST-Line en la carrocería. Su interior se beneficia de un volante deportivo en cuero, asientos deportivos con pespuntes en rojo y palanca de cambios específica. Otro detalle existente aunque diferente entre ambos es el labio delantero del Fiesta, mientras que el Focus recibe por su parte un nuevo acople en el paragolpes.
La gama de motores con la que está disponible en el caso del Focus ST-Line son los EcoBoost 1.0 de 125 CV, 1.5 de 150 y 182 CV, además de los diésel TDCi 1.5 de 120 CV. La gama gasolina se caracteriza por el EcoBoost 1.0 de 100 CV, así como los de 125 y 140 CV, mientras que el diésel disponible es el 1.5 TDCi de 95 CV.
Los precios arrancan en los 17.225 euros para el Fiesta y 21.825 euros para el Focus (disponible en carrocería de cinco puertas o familiar SW).
Ford Fiesta ST-Line y Focus ST-Line