Aunque el titular pueda suscitar que se trata de algún tipo de lanzamiento de un one-off de Ford, ni mucho menos. Se trata de un concesionario de Ohio que siguiendo la estela de potencias descomunales y en muchas ocasiones, carentes ya de sentido para un coche street-legal, han puesto a la venta unidades del Mustang GT con 1.200 CV de potencia por tan sólo 42.500 euros.
La pregunta es… ¿cómo logra esta espectacular cifra de potencia? La pregunta tiene respuesta, aunque evidentemente no es predicable en tan sólo una línea: se trata de un Mustang dotado del V8 de 5 litros con dos turbocompresores de 62mm, un intercooler de mayor capacidad, controladora de presión de turbo y salida de escape de Basani. Esto tiene un coste de 42.500 euros, a lo que habría que añadir los impuestos para legalizarlo de cara a poder conducirlo por la calle.
¿Dónde está el truco, entonces? En dos partes: la primera, es que no tenemos garantía mecánica, y la segunda, es que con esta preparación base su motor no aguantará muchos asaltos si pretendemos exprimir su potencial. Si realmente quieres hacerlo fiable, tendrás que añadir 46.700 euros adicionales, en los que se añade un árbol de transmisión que soporta hasta 800 CV, inyectores más gordos, conversor eléctrico para la bomba de gasolina, bomba de aceite de mayor caudal, entre otros.
Aún ni con esta preparación adicional el modelo ofrece plenas garantías de que dando los 1.200 CV con un uso exigente sea fiable de manera prolongada, por lo que ahí serás tú ya quien debas sacarte las castañas del fuego reforzando todos esos puntos débiles y aumentar su fiabilidad de manera paulatina. Ahora bien, ¿realmente merece la pena pasar por todos esos dolores de cabeza e intranquilidad a la hora de coger el coche por el miedo a romper o que nos deje tirados?
