Impresionante como él solo, es lo único que se me ocurre cuando ves en persona un vehículo como el Bugatti Veyron Grand Sport Vitesse, un superdeportivo que quizás no sea el más espectacular a nivel estético del mercado actual, quizás no se al el más económico ni a la hora de comprarlo ni para mantenerlo pero hay que reconocer que es simplemente espectacular.
Como recordatorio, la unidad presenten en el Festival de la Velocidad de GoodWood, monta un enorme W16 de 8.0 litros que gracias a cuatro estupendos turbocompresores es capaz de ofrecer una potencia máxima de 1.200 caballos a 6.400 rpm mientras que el par motor se eleva hasta los 1.500 Nm entre las 3.000 y las 5.000 rpm.
Como es lógico el Bugatti Veyron Grand Sport Vitesse es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en tan sólo 2.6 segundos, rompe la barrera de los 200 km/h en 7.1 segundos y llega a 300 km/h en tan sólo 16 segundos. Como seguro recordarás la velocidad máxima del vehículo que ves en pantalla se sitúa sobre los 410 km/h lo que hace de este vehículo el roadster de producción más rápido construido jamás.
Vía: gtspirit
