El 14 de Abril de 1929 se celebró el primer Gran Premio de Mónaco. Fué el primer gran premio de un evento que es ya, algo más que una simple carrera de Formula 1, glamour, lujo, excesos… Mónaco es distinto y único. Querido y odiado por pilotos y escuderias.
La primera edición se realizó, como hemos dicho, en 1929. En 1950 formó parte del primer campeonato mundial de Fórmula 1. Habitual del Campeonato desde sus incios, no ha faltado a ninguna cita desde 1955.
El Gran Premio de Mónaco recorre las calles monegascas, reviradas y retorcidas. Actualmente, aparte del futuro gran premio de Valencia, no hay mas circuitos urbanos. Esto en los inicios de la Fórmula 1 no era tan exclusivo, por ejemplo en Barcelona teníamos el Gran Premio de Montjuich.
Las medidas de seguridad, la complicada hubicación de los boxes y no poder disponer permanentemente del circuito durante todo el fin de semana, hicieron que progresivamente fueran siendo eliminados del cartel.
Mónaco no, resiste desde su fundación. Hablar de Mónaco es hablar de enfrentamiento de opiniones.
Los pilotos, las escuderias, los mandatarios de la F-1 todos lo adoran y lo repudian. Los pilotos odian y aman conducir en un trazado que el más mínimo error puede dejarte fuera de carrera, donde es fácil verse envuelto en una colisión múltiple o qualquier otro extraño incidente que sólo puede pasar en Mónaco.
Aunque hubo un piloto que consigió más victorias y no fue otro que el genial Ayrton Senna con 6 victorias haciendole ganar el apodo de «El príncipe de Mónaco».
Pero hablar de Mónaco, no es solo hablar de grandes pilotos y acumulación de victorias. Para entender Mónaco y para saber que significa tenemos que hablar de gestas, accidentes, remontadas espectaculares, leyenda en definitiva.
De entre muchas anecdotas, destacaremos las más espectaculares, que de la mano de los yates, la jet-set y el glamour de las estrellas de cine, han hecho de Mónaco este Gran Premio tan especial.
En 1955 Alberto Ascari atracó su Lancia D50 entre los lujosos yates a la salida del tunel, en laNouvell Chicane. En la vuelta 21, rodaba en segundo lugar intentaba seguir la estela de Stirling Moss y su Mercedes, erró en la trazada y salió disparado hacia el agua. Tras un minuto y medio sumergido, los buzos consiguieron rescatarlo.
En 1967 Lorenzo Bandini a manos de un Ferrari F312/66 , en la vuelta 82, yendo a mas de 290km/h en la salida del tunel, choco, y rapidamente su Ferrari se vio envuelto en llamas. Las balas de paja que estaban por seguridad, avivaron el fuego. El impacto fue brutal, la gente del propio publico ayudo en las tareas de rescate.
5 minutos despues consiguieron retirar el cuerpo de Bandini. Sorprendentemente aun respiraba, pero la gravedad de sus heridas hizo que tres dias después muriera en el hospital. Este ha sido todo y ser un circuito de los denominados peligrosos, el unico accidente mortal.
En 1982 solo 3 pilotos consiguieron finalizar la carrera de los 20 iniciales. Ricardo Patresse de la escuderia Brabham ( jefe de la cual era el hoy jefe de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone).
Ayrton Senna protagonizó en 1984 una gran remontada, partiendo desde decimotercera posición y bajo un aguacero, hizo gala de su habilidad al volante con un modesto Toleman Hart alcanzando la segunda posicion detrás del Profesor Alain Prost. El propio Prost reconoció que hubiera dejado pasar a Senna de haberlo alcanzado ya que Senna ese año no disputaba el título. Fue el primer podio de la carrera del brasileño. El primero de una leyenda.
Estas son algunas de las muchas historias que mantienen el Gran Premio de Mónaco especial, unico y necesario. Cualquier aficionado de la Fórmula 1 desea que nunca caiga del calendario.
Muy buena noticia recordatoria para aquellos que no vivimos aquellas carreras y lo mejor las imágenes que acompañan.
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