La nueva generación del Mercedes SL está encaminado a constituirse como un proyecto de enorme envergadura que la marca alemana está trabajando más a fondo de lo que pudiésemos imaginar en un primer momento. No es ningún secreto que los de la estrella quieren un modelo real, acorde a los tiempos actuales, y enfocado de una manera diferente a lo que hemos ido viendo en estas últimas décadas. Las necesidades son diferentes, y ojo, porque el nuevo SL será brutal.
La idea no pasa por construir un roadster de alto lujo y calidad que evoque al pasado, sino un proyecto que marque tendencia y que sea el alma de la gama de descapotables en la marca alemana. El nuevo Mercedes SL tendrá inspiración directa en el 300 SL de mediados del siglo pasado (imagen siguiente), con todo lo necesario para captar un cupo de potenciales compradores englobado más allá de un pequeño nicho de mercado, donde el SL se asienta actualmente.
A falta de información concreta y de detalles jugosos, podemos adelantar que el nuevo Mercedes SL contará con un techo de lona de accionamiento eléctrico que irá acorde con una configuración de 2+2 asientos. No será un modelo biplaza, lo que deja la puerta abierta a unas dimensiones y volúmenes mayores que los del actual SL, que sí cuenta con dos asientos. Yendo más allá, el Mercedes SL estará más cerca de un nicho de mercado de mayor envergadura y con mayores posibilidades de expansión.
En un futuro cercano, el Mercedes SL debutará mayormente con motores de seis y ocho cilindros, incluyendo variantes AMG Performance y con al menos una opción híbrida en sus filas. Todo esto, en un plazo inferior a tres años.
